EL LIBRE ha tenido acceso al escrito de denuncia que el trabajador del Hospital de Riotinto J. F. D. remitió a la gerente del Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva, María de la Paz Pérez, con respecto al presunto caso de prevaricación protagonizado por la responsable de Personal E. G. H.
Así sucedió todo: el 15 de febrero de 2022, I. V. M, de la Unidad de Atención al Profesional (UAP) del Hospital Comarcal de Minas de Riotinto, llamó por teléfono a este celador del SAS, J. F. D., y le ofreció uno de los dos contratos de sustitución de larga duración a partir del 1 de marzo que tenían disponibles en ese momento, por una sustitución de una comisión de servicios. La respuesta del denunciante fue preguntar por los contratos de interinos vacantes, ya que poseía puntuación más que suficiente como aspirar a ellos, a lo que I. V. M. contestó que «lo único que tengo ofertado y autorizado son dos comisiones de servicios».
Al trabajador se le negó la información de a quién iba a sustituir, una falta de transparencia que le escamó: «Un delegado sindical corroboró lo que yo pensaba, que, cuando a través de la Bolsa del SAS ofertan un contrato de sustitución, la persona que llama tiene que dar el nombre del profesional que se va a sustituir».
Al final, el profesional sanitario aceptó el contrato de sustitución de la comisión de servicios de la celadora M. P. G. M., que se encontraba con el traslado temporal aprobado y ya trabajando en Zamora desde julio de 2021 «para que no me penalizasen tres meses sin llamarme para trabajar como celador en el SAS», cuenta a EL LIBRE. Su puntuación era, por aquel entonces, de 45,400 puntos.
El 8 de abril de 2022 desde la UAP de Minas de Riotinto llamaron al celador B. S. G., que es hijo de E. G. H., jefa de Personal del Área de Gestión Sanitaria (AGS) Norte de Huelva recientemente suspendida de empleo y sueldo (pero no cesada), para ofrecerle un contrato de celador de larga duración, en la categoría de discapacitados, que comenzaría el 1 de mayo de 2022, sustituyendo al encargado de celadores J. A. R. N., que estaba sin sustituir desde el 12 de marzo de 2021.
El trabajador que ha destapado esta presunta trama detalla: «B. S. G. estaba en turno libre y, cuando salieron las listas definitivas del corte de 2020, apareció en la lista de candidatos discapacitados, con los más que dudosos 5,100 puntos baremados en Experiencia NO SAS de la bolsa de trabajo del Servicio Andaluz de Salud». Con estos puntos, el hijo de la jefa de personal habría obtenido 37 puntos totales, que le valieron para acceder al cargo de celador/a de sustitución del centro hospitalario.
«Contratos retenidos»
Asimismo, J. F. D. denuncia que, presuntamente, desde el Hospital de Minas de Riotinto «tuvieron retenidos esos dos contratos de larga duración de celadores con el objetivo de ofertarle el mejor contrato al hijo de E. G. H.«. «Tanto es así que, entre enero y febrero de 2022, se jubilaron dos celadores y los contratos de interinos vacantes se ofertaron el 16 y el 17 de marzo de 2022 para empezar el 1 de abril».
Según el denunciante, «desde la UAP del Hospital de Riotinto le hicieron varios contratos a B. S. G. estando vigente el corte de turno libre del periodo de valoración 31 de octubre de 2019, en el que, a pesar de tener tan solo 28,300 puntos, fue llamado por teléfono mucho antes que a compañeros que tenían bastantes más puntos que él para, además, ofertarle contratos de más duración». Son presuntas irregularidades que el Servicio Andaluz de Salud, si quisiera, podría investigar internamente en paralelo a la investigación policial.
En ese sentido, J. F. D. explica todo lo que ha luchado para que esta supuesta ilegalidad salga a la luz y se investigue: «Dijo el director económico administrativo del Hospital de Riotinto, a primeros de enero, que habían apartado a la jefa de Personal y que iba a poner en funciones en ese cargo a Ia administrativo que, precisamente, era la que llamaba por teléfono para ofertar los contratos de larga duración. Y es por ello que, en fecha 20 de enero, presenté un escrito en el registro del Hospital de Riotinto dirigido a la directora gerente, María de la Paz Pérez, que es también responsable del AGS Norte de Huelva, solicitando que se le abra un expediente a dicha administrativa, así como que se le rescinda el contrato de celador de larga duración al hijo de la exjefa de Personal».
María de la Paz Pérez se lava las manos
Pero María de la Paz Pérez le ha confirmado al denunciante que, «en relación a nombramientos efectuados desde el departamento de Personal en la categoría de celador, la agencia está obligada a suspender cualquier actuación en relación al asunto investigado y queda pendiente de resolución judicial, quedando vinculada a los hechos que se declaren probados en resolución judicial firme, tras los cuales la agencia tomará las medidas oportunas».
«En otras palabras, que, a pesar de los evidentes datos respecto a las irregularidades que denuncié en el Juzgado de Valverde del Camino en mayo de 2022 y también en el escrito que le dirigí a la directora gerente del Hospital de Riotinto el 20 de enero, desde «la agencia» parece ser que van a seguir mirando hacia otro lado mientras que no haya una sentencia firme, a pesar de que todavía pueden pasar varios meses hasta entonces», lamenta J. F. D.
«Esperemos, que antes que finalice todo este largo proceso, desde la Consejería de Salud y Consumo hagan lo que esté establecido en estos casos tan graves, para que, de una manera u otra, salgan quienes tengan que salir de los puestos que actualmente ocupan«, remarca el denunciante.
Por último, J. F. D. también le remitió toda la documentación al director gerente del SAS, Diego Vargas, máximo responsable del Servicio Andaluz de Salud.
Si más personas tuviesen el valor de denunciar también lo que les ha pasado a ellas, probablemente algún día se acabarían los chanchullos.
No hay que tenerles miedo, hay que denunciar. En Ronda estamos en proceso para denunciar muchas irregularidades por lo mismo. Gente con 28 puntos con los mejores contratos, interinidades y puntos con el doble de puntos de contrato en contrato. Dirección se lava las manos. Hay gente que se cree el dueño del cortijo.
A por ellos…