El consejero de Salud, Jesús Aguirre, ha tenido que salir a la palestra varias veces para referirse a la lamentable situación de las residencias de ancianos en Andalucía, una competencia de la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación
«Tú tranquila, que de esto me encargo yo». Podría ser la frase que Jesús Aguirre, consejero de Salud, le ha susurrado al oído a la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, para sacarle las castañas del fuego al respecto de la preocupante situación de las residencias de mayores en Andalucía: 273 muertos a día de hoy y 1.462 contagiados. Aunque se esconda, todo el mundo sabe que las residencias de ancianos y los centros para personas discapacitadas son responsabilidad de la consejería que dirige Ruiz.
La diputada de Ciudadanos por Huelva Rocío Ruiz tiene 52 años y acaba de llegar a la política, ya que la formación de Juan Marín la fichó tras haber sido directora del Instituto de Educación Secundaria Pérez Mercader de Aljaraque durante 14 años. Si es verdad que Ruiz se considera «una activista de la Dependencia», como dijo en alguna ocasión, ¿por qué no quiere dar la cara y afrontar los errores que ha cometido por su falta de previsión ante la tormenta del coronavirus? ¿O es que el PP quiere asumir temporalmente las competencias de las políticas sociales que, ahora mismo, son de Ciudadanos en el Gobierno bipartito?
¿Esta forma de ponerse la mordaza ella misma pone de relieve su incompetencia para afrontar los hechos y poner en marcha mecanismos resolutivos? Todo apunta a que así es. Y es que un consejero o un ministro deben tener aptitudes y actitudes excelentes para tomar responsabilidades tan importantes. No vale cualquiera, pero parece que puede más la partidocracia a la hora de asignar puestos ejecutivos. La ciudadanía espera que eso cambie en la era poscoronavirus, porque los torpes e indolentes ya no valen para gobernar.
Rocío Ruiz se ha mostrado como una irresponsable al no comparecer ante los medios y explicar la verdadera situación que viven los geriátricos en Andalucía
Rocío Ruiz se estrenó en la vida política a principios de 2019 después de 28 años dedicada a la docencia como licenciada en Ciencias de la Educación. Ha desarrollado su labor en varios centros de toda Andalucía en los que ha impartido clases tanto en Infantil como en Primaria, además de Secundaria y Bachillerato. Una formación que no tiene nada que ver con la atención a personas mayores. Lleva desaparecida toda la cuarentena.
La calidad por decreto no se convierte en realidad
La Orden de 1 de julio de 1997, por la que se regula la acreditación de los centros de atención especializada a las personas mayores y personas con discapacidad, tiene como objeto desarrollar las condiciones materiales y funcionales de calidad que se exigen para la acreditación de los centros de atención a las personas mayores y personas con discapacidad conforme a lo dispuesto en el artículo 26 del citado Decreto 87/1996, de 20 de febrero.
Todo esto queda muy bien en el BOJA, pero la verdad tiene aristas que pinchan demasiado: enfermeras desprotegidas en residencias de mayores por falta de material; cuidadoras obligadas a trabajar en condiciones peligrosas para su salud; ancianos fallecidos sin poder ni siquiera ingresar en una UCI; centros públicos de gestión privada con inspecciones inexistentes y subvenciones millonarias con escaso control del gasto…
Por su parte, el Plan de Acción Integral para las Personas con Discapacidad en Andalucía (2003-2006), aprobado por Acuerdo del Consejo de Gobierno de 2 de diciembre de 2003, en desarrollo de la Ley 1/1999, de 31 de marzo, de Atención a las Personas con Discapacidad en Andalucía, incluye entre sus objetivos la revisión de los requisitos mínimos materiales y funcionales de los centros residenciales y de día, así como los niveles de calidad exigidos.
Aunque los centros de discapacitados están un poco mejor que los geriátricos (también son muchos menos), hay 193 positivos en Andalucía a día de hoy. Y Ruiz sigue callada y desaparecida en combate.
Bueno, yo ni había caído en que la Consejera tenía que haber dado la cara, porras, pues es verdad!
El Libre no defrauda, siempre me abre los ojos a la realidad. En otros momentos me sorprendía a cuando habéis artículos que desarrollan lo que pienso, pero bien argumentado. Aquí me sorprendeis desvelando lo que ni siquiera se me ocurre que está ocultándose.
Por las vivencias que he tenido con la Ayuda a Domicilio, en un pueblo de Granada, quisiera dar mi opinión.
Las trabajadoras que conozco y han cuidado de mi madre desde 2015 a julio 2017 que falleció, con Alzheimer e impedida por un ictus, son profesionales como la copa de un pino.
Asuntos Sociales, en Andalucía, ya os digo, desde mi experiencia, no funciona correctamente. Llegan tarde a asistir a las personas dependientes, que se pasan años en que les concedan la ayuda a la dependencia. En ésta Consejería hay muchos políticos y funcionarios trabajando, por favor!!!!!!!!!!!!!!, agilicen los trámites!!!!!!!!!!!!!!, ésto es un SOS a la dependencia!!!!!!!!!!. Que se hagan encuestas!!!!!!!!!!!!!, por favor, que hay mucha gente que lo necesita, no se lo conceden y están sufriendo. Gracias.
Mi madre falleció antes de recibir esa ayuda,
habíamos presentado la solicitud varios años antes.