El día 8 de febrero está prevista la segunda dosis de vacunación del gerente de EPES, José Luis Pastrana, y de la directora provincial del 061 en Málaga, María Belén Lozano, en el centro de salud Jesús Cautivo Trinidad, altos cargos dependientes directamente de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía. El gerente de EPES es, además, miembro del comité de expertos del Gobierno andaluz para la pandemia
Tanto el gerente de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias EPES-061, José Luis Pastrana, como la directora provincial de Málaga, María Belén Lozano, se vacunaron de la primera dosis, como adelantó EL LIBRE, «aprovechándose de los cargos que ostentan, dado que ninguno es personal de primera línea en el ámbito sanitario y sociosanitario, ni están en relación alguna con pacientes, es más, por lo general se encuentran teletrabajando desde sus domicilios«, denuncian desde el Sindicato de Sanidad de CGT en Málaga.
Asimismo, CGT denuncia que el día 8 se va a cometer el segundo acto descarado de «una tropelía gravísima de tráfico de influencias«. El personal del 061 que trabaja directamente con pacientes que atienden urgencias o emergencias desde los Equipos de Coordinación Avanzada (ECA) o en las UVI móviles o el resto de personal adscrito al grupo 2, según el protocolo de vacunación, no terminarán de obtener la segunda dosis de la vacuna hasta el próximo día 10 de febrero.
Estas actuaciones incívicas e inapropiadas de cargos públicos no pueden quedar impunes, por ello desde CGT en Málaga se insta a la Fiscalía para que investigue los hechos y emita informe sobre los posibles delitos que puedan concurrir, tal y como ya hacen otras fiscalías provinciales en el país con otros trincavacunas.
La denuncia de la Federación Provincial de Sindicatos de Málaga de la Confederación General del Trabajo (CGT) ante la Fiscalía Provincial de Málaga, a la que ha tenido acceso EL LIBRE, solicita una investigación profunda: «Entendemos que, si la vacunación de dicho personal se ha producido, lo ha hecho al margen de los planes estatales y autonómicos de vacunación. Ponemos en su conocimiento todo ello, ya que entendemos que la presunta vacunación de estas personas, de ser cierta, se ha producido al margen de lo establecido en los planes estatales y autonómicos de vacunación y, por si pudiera ser constitutiva de delito, dado que el escenario actual de retraso en el suministro de vacunas hace que haya población prioritaria que aún no la ha recibido».
No son los únicos
Al parecer, puede que no sean los únicos altos cargos de EPES-061 que han recibido la vacuna sin corresponderles. También podrían haberse vacunado ya el director de Salud Responde, Javier Vázquez, cuyo centro de trabajo se encuentra en Jaén, y algún que otro directivo provincial de Almería.
«La Consejería de Salud y Familias guarda silencio y no ha respondido al escrito presentado por el Sindicato de Sanidad de CGT en Málaga la pasada semana pidiendo el esclarecimiento de los hechos y el cese del gerente y la directora provincial de EPES-061 en Málaga, si como todo parecía indicar y ahora se confirma con la cita del 8 de febrero, se han aprovechado de sus cargos para vacunarse, anteponiéndose en el tiempo a los propios profesionales del 061 que están en contacto directo con quienes sufren alguna urgencia o emergencia derivada del COVID o cualquier otra patología», expresa Juan Carrillo, secretario de Jurídica de CGT Málaga.
«Desde CGT hacemos también un llamamiento al Sr. Bendodo a no mentir ante los periodistas y a que asuma sus responsabilidades dimitiendo por falsear la realidad ante los medios de comunicación y a que esté presente el próximo lunes 8 de febrero en el centro de salud de la Trinidad Jesús Cautivo de Málaga y compruebe por sí mismo cómo sus altos cargos se aprovechan de su estatus y se vacunan sin ningún reparo, con el beneplácito de los máximos responsables del Gobierno andaluz», reza en un comunicado de este organismo sindical.
«Estos abusos debieran llevar al cese inmediato de los trincavacunas y a la dimisión de los consejeros de Salud y Familias, Jesús Aguirre, y de Presidencia, Elías Bendodo, por intentar ocultar a la sociedad andaluza los desmanes de altos cargos de su Administración», denuncian desde la CGT.
Por último, Juan Carrillo confía en que la Fiscalía emita «un informe riguroso» sobre los posibles delitos que se estén pudiendo cometer por parte de quienes, aprovechándose de sus cargos públicos, se han vacunado anteponiéndose a quienes se han considerado legalmente como colectivos más vulnerables en la sociedad e igualmente hace un llamamiento «a quienes se han beneficiado injustamente de su posición y a los consejeros de la Junta que los intentan camuflar, incluso mintiendo públicamente, a que presenten su dimisión inmediata».
Bravo por CGT, al menos un sindicato, no sanitario, se digna a denunciar estas corrupciones. ¿Dónde están los demás subvencionados? Ni están ni se les espera.