Tal día como hoy hace 125 años, nació en Gallarta (Vizcaya) Dolores Ibárruri ‘La Pasionaria’ (1895 – 1989)
A lo largo de su trayectoria vital se forjó una leyenda que no morirá jamás. Su fortaleza y entrega ideológica son su legado histórico. Mujer valiente, madre sufrida e incansable trabajadora, pasó a ser una representante firme del proletariado femenino.
Su carácter laboralista incrementó su feminismo y los conceptos igualitarios. Contundente y enérgica, desarrolló una ferviente conciencia política en pro de la defensa del mundo obrero frente a un sistema capitalista opresor.
Su facilidad para la oratoria y la apología apasionada de sus ideas y proyectos la consagraron para recibir el sobrenombre de La Pasionaria. Pionera en militancia en el PCE, fue símbolo de la resistencia a favor de la República durante la contienda civil.
Su famoso grito de batalla, «No pasarán», se convirtió en un lema, más allá de su generación. Después de la guerra vivió el exilio en la URSS y se convirtió en una representante fundamental del comunismo internacional.
Una vez restaurada la democracia española y configurado el primer Parlamento, fue nombrada diputada en las Cortes, en 1977. La lealtad hacia los derechos sociales, la libertad y la igualdad eran su bandera de presentación. Y su puño alzado, como símbolo de lucha, será eternamente su gran seña de identidad.
Hoy yo creo que el voto en democracia está muy obsoleto. Ya no necesitamos a nadie que nos represente. Ya podemos votar por internet nuestras propias leyes. Como pagamos a hacienda. Con 20 políticos y los jueces sobraría.