Estampitas (IX): Úrsula Corberó

Te gusta ser una lolita en Instagram. Nabokov no podría escribirte pues hay imágenes que no valen mil palabras, ni un millón. Ser arte en movimiento complica su explicación por escrito. ¿Cómo se narra la estética del movimiento? Cuando el arte actúa con el cuerpo y con la voz, la escritura se palpa en un humilde segundo plano. El plano general tiene la costumbre de buscar a quien lo imanta con la violencia suave de una mirada cegadora

Úrsula tiene la física de su parte, la manzana de Newton cayó sobre los labios de Eva, para tentar a los espectadores de cualquier espectáculo cinematográfico donde sale la Corberó. Si el fruto prohibido es no poder ver cómo trabaja, puedo ser condenado de manera eterna como anticipo ante el futuro conocido.

La química está en sus ojos, que no se pueden explicar y tampoco escribir. Este artículo es otra estafa, tan piramidal como una silueta egipcia o descifrar el jeroglífico de los mil significados de su mirada. Tienen la fuerza que sólo conoce la propietaria de la misma. Podemos especular toda una vida, que ella arruinará cada uno de nuestros pensamientos con un leve guiño o parpadeo.

Tokio ya no nos quiere. Ray Loriga escribió ese libro, pero se olvidó de que, en el futuro, sería nuestro único amor posible. La industria audiovisual occidental se rinde ante ella. La banca siempre gana, pues o mata o muere. Úrsula entiende la actuación de la misma manera. Hay que darlo todo, mientras en el mundo, Oriente y Occidente siguen a lo suyo, a sus guerras y esas cosas que solo ellos entienden. Ucrania y Palestina son los espectadores de una película de alto presupuesto cuyo guión ha sido escrito por hienas. A todos se nos está haciendo demasiado larga, pero los egos de sus muchos directores no tienen fin. La Corberó sabe que sólo se es libre mientras se actúa. Que la vida, que ni se escribe ni se actúa, iba en serio lo sabe todo el mundo, desde Jaime Gil de Biedma hasta Jorge Javier Vázquez.

Hay días que un servidor camina hacia la Casa de la Moneda y Timbre, la Casa de Papel hecha serie de televisión. Uno vive cerca de aquella zona y cuando llego fantaseo con entrar y ser raptado por ella. Pero no por el personaje, sino por la actriz. Que me mire y me fulmine en ese mismo instante. Que no entienda nada, pues ya está ella para comprenderlo todo. Que todos acabamos siendo rehenes unos de otros, se sabe cuándo nos abandona la infancia.

Femme fatale porque es talentosa y atractiva. La sencillez formal no puede explicar a este tipo de personas. Si no sabes explicar la belleza y la inteligencia cuando van unidas, haz lo que hacemos los seres corrientes como yo: disfrutar de esa conjunción que, si es mágica, es porque no necesita explicación. La gran Madonna la ha subido al escenario en el concierto que recientemente ha dado en Barcelona. La madre de Dios es también la reina del pop, y su hija sale con un argentino para decirle al mundo que es ella quien tiene la primera y la última palabra.

Que la policía no es tonta es una expresión que quien mata no quiere creer. Cuando es una policía quien asesina y además a un compañero de trabajo, la frase corre el riesgo de evaporarse de manera fantasmal sobre esa niebla. Úrsula es un cuerpo en llamas porque el fuego solo se apaga cuando se cansa de quemar.

Que la mejor Úrsula Corberó es la que está por llegar lo sabemos todos. No es fácil concentrar toda la fuerza de atracción que emana su presencia. Va a conseguir lo que se proponga, pues todo gravita alrededor de sus objetivos. Cuando esto ocurra, dejará lo que estoy seguro que es para ella un segundo plano, el de poner la cara delante de la cámara. Hay un mundo interior muy rico dentro de ella, que se adivina de manera tangible y que dirigirá lo que quiera, sobre todo películas, y ese será su momento, pero también el nuestro. Qué poco queda para que eso pase. Mientras tanto, esperar mirándola hace de ese momento una eternidad perfecta.