Un patinete eléctrico derrapando por una calle peatonal de Huelva, a centímetros de atropellar a una persona mayor; un patinete eléctrico a más de 30 km por la acera del Paseo Colón de Sevilla a punto de atropellar a un hombre de mediana edad; un patinete eléctrico que se salta el semáforo de la avenida Reyes Católicos y se queda a un palmo de atropellar a un peatón; dos adolescentes montados en un Vehículo de Movilidad Personal (VMP) haciendo un ‘streaming’ a 30 km por hora… En todos los casos, los conductores de esos cacharros del demonio no llevaban casco ni ningún tipo de protección, incumpliendo varias normas de la Ley de Tráfico. ¿Qué está pasando?
Siempre que salgo a la calle, observo que los patinadores eléctricos van sin casco, casi todos. Trucan sus herramientas de la muerte para ir a 100 km hora. Amenazan con el golpeo o el atropello a la gente con total impunidad y, lo que ya es de cenutrios, ponen en peligro sus propias vidas. Caminamos con cierto temor por las zonas peatonales y por las aceras de nuestras ciudades, quién nos lo iba a decir. Y todo por la supuesta movilidad sostenible, ese modo de transporte silencioso que amplifica el peligro de accidente, sobre todo si a los manillares hay gente con poco cerebro y sin conciencia (habrá patinadores eléctricos que cumplan la normativa, pero son los menos y a ellos no va dirigido este artículo). Si no teníamos bastante con los maleducados que van en bici y se creen Induráin por las aceras y carriles bici de nuestro país, ahora ha llegado una nueva plaga y es más virulenta.
Un informe elaborado por la Fundación Mapfre y Cesvimap cifra en 385 los accidentes con patinetes eléctricos desde enero de 2021 hasta septiembre de 2022, de ellos 83 fueron graves. Estos siniestros dejaron 13 víctimas mortales en España, más del doble que en años anteriores. Y la cosa va a peor.
Ahí van algunas normas de la Dirección General de Tráfico: está prohibido que los VMP vayan por aceras, zonas peatonales, pasos de travesía, autopistas, autovías, vías interurbanas o túneles en ámbito urbano. Observo que, continuamente, los muy maleducados y kamikazes se pasan por el forro de los cojones o de los ovarios, según el caso, estas sencillas normas de obligado cumplimiento.
Los patinetes deben circular por los carriles bici, si existen, o por la calzada de las calles, nunca por aceras, carreteras, autovías o autopistas. Se deben respetar todas las normas de circulación, semáforos y señalizaciones. Pues bien, los eléctricos patinadores se saltan a la torera todo esto, como si ellos fueran inmortales y coches, motos y peatones tengan que postrarse a su paso.
La DGT recuerda la obligatoriedad de utilizar un casco de protección homologado para ir en patinete eléctrico. Pero por mucho que lo recuerde, esta gentuza seguirá provocándose daño a ellos mismos y, lo que es más grave e intolerable, a los demás.
Muerte en Granada
La normativa es demasiado laxa. La Policía, a la hora de multar, es demasiado laxa. Y en general, la sociedad está consintiendo demasiado la proliferación de estas máquinas de dolor, que hacen que los peatones caminemos con miedo por las aceras españolas. ¿Por qué los padres se gastan un mínimo de 300 euros en regalarle a sus hijos estos cacharros diabólicos? Voy a darles algunos datos para que se hagan una idea de las dimensiones del problema: hace poco, murió en Granada un hombre que circulaba en un patinete eléctrico con capacidad para alcanzar los 120 kilómetros por hora. El accidentado no llevaba casco y se dio un fuerte golpe en la cabeza contra el suelo.
Atropello mortal en Zaragoza
El primer atropello mortal causado por un patinete eléctrico en las calles de Zaragoza, del que fue víctima un hombre de 79 años al que arrollaron en un paso de cebra de la avenida Valle de Broto. El accidente se registró el 2 de septiembre de 2022, pero el fallecimiento de P. E. H. se produjo cuatro días más tarde en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Clínico. El causante del accidente, un joven de 29 años identificado como D. A. E., fue finalmente acusado por un delito de homicidio por imprudencia. Y ello podría convertirle en el primer usuario de un Vehículo de Movilidad Personal (VMP) que acaba condenado a prisión en Aragón.
La fragilidad de un patinador eléctrico frente a un coche
Un joven de 18 años murió en diciembre de 2022 en Sevilla, después de ser atropellado por un conductor ebrio que en un primer momento se dio a la fuga. Después fue detenido por la Policía Local. Triplicó la tasa máxima de alcoholemia permitida y reconoció que había consumido drogas durante la tarde. La víctima circulaba en un patinete eléctrico. Los hechos ocurrieron en la calle Cruz del Sur.
«Nuestra normativa estatal ha dejado sin regular cuestiones tan importantes como la edad para circular con patinetes eléctricos o la exigencia de un seguro obligatorio», señala a Confilegal Maren García-Valle Pérez, abogada de García-Valle Abogados especializada en responsabilidad civil y autora del libro La responsabilidad por daños en accidentes con patinetes eléctricos, publicado por Atelier en 2022.
«La normativa estatal ha establecido la obligatoriedad del uso del casco»
“En cuanto a la utilización del casco por los conductores de patinetes eléctricos, la normativa estatal ha establecido la obligatoriedad de su uso, dejando a la normativa municipal la regulación de los términos de dicho uso», añade. «Esta falta de regulación estatal crea inseguridad jurídica por la dispersión normativa que se produce con las diferentes regulaciones municipales».
No obstante, «a la hora de determinar la responsabilidad en un accidente con patinete eléctrico, hay que revisar siempre lo establecido por dichas normativas municipales para tener en cuenta el marco normativo aplicable», según la abogada.
Las zonas por donde pueden circular los conductores de patinetes eléctricos también son objeto de la normativa municipal, pues la estatal sólo ha regulado por dónde no pueden circular: aceras, zonas peatonales, autopistas, autovías y túneles urbanos. García-Valle apunta que «algunos ayuntamientos en sus ordenanzas municipales han regulado que los VMP pueden circular por carril bici, mientras que otros permiten que circulen también por la calzada».
Según diversas estimaciones de entidades vinculadas al sector de la micromovilidad, cada día circulan por nuestro país más de un millón de patinetes
El uso del patinete eléctrico se ha disparado en España tras la pandemia. El temor al contagio incrementó el número de ventas de este vehículo de movilidad personal y según diversas estimaciones de entidades vinculadas al sector de la micromovilidad cada día circulan por nuestro país más de un millón de patinetes.
El estudio Brand Tracker revela que España es el segundo país europeo donde mejor acogida tienen los patinetes eléctricos (71% de los encuestados), tan solo por detrás de Polonia (80%). Curiosamente se trata de los dos países europeos con más coches en propiedad.
La facilidad de uso (53%), el confort (50%) y el precio (49%) son las principales razones por las que los ciudadanos españoles se muestran decididos a utilizar patinetes y bicicletas eléctricas. Por lo que respecta a los demás países encuestados, coinciden todos con la facilidad en el uso como la razón más recurrente, excepto para los suecos, que señalan la rapidez como principal motivo.
Con motivo de la Semana Europea de la Movilidad 2022, Sprinter informó de que el segmento de patinetes eléctricos en España aumentó sus ventas un 290% con respecto al año 2021. Estas cifras confirman a este medio de transporte como el de más tirón entre los urbanitas.
Sin embargo, hace falta más educación vial para los jóvenes, adaptada a esta nueva realidad sostenible, que se ha convertido en un negocio muy lucrativo para las empresas que fabrican y venden los VMP, ya que la horquilla de precio de un patinete eléctrico va desde los 275 euros hasta los más de 6.000 euros, valor del más costoso.
Las tiendas venden el patinete como una forma saludable de transporte. ¿Cómo puede ser saludable un cachivache que tiene que ir por la calzada, en clara inferioridad ante camiones y coches? Pero tienen prohibido ir por zonas peatonales y aceras, porque ahí cambian las tornas y pasan a ser los VMP el gran peligro para la integridad del peatón, porque van muy rápido y se desplazan sigilosamente. Y encima hay empresas que los alquilan a turistas para ir por zonas peatonales, algo que está totalmente prohibido.
Si modificas tu patinete eléctrico te pueden multar con 500 euros
El Reglamento General de Vehículos establece que los patinetes eléctricos están dentro de los VMP. Se trata de vehículos de una o más ruedas, dotados de una sola plaza y propulsados por motores eléctricos que pueden otorgar al patinete una velocidad máxima de entre 6 y 25 km/h. Además, sólo pueden equipar un asiento o sillín si llevan el sistema de autoequilibrado.
Si tu patinete no cumple estos requisitos, además de la sanción, los agentes lo inmovilizarán y procederán a su depósito.
La DGT ha elaborado un manual de características técnicas de los vehículos de movilidad personal, en el que recoge cómo deben ser los patinetes para poder circular por las vías y la obligación de que dichos vehículos hayan sido certificados por los organismos competentes. Si quieres consultar este manual, accede aquí.
Y es que, a partir de enero de 2024, todas las marcas y modelos que existen en el mercado deberán estar certificados de acuerdo a esta nueva norma, aunque se otorga una moratoria a los patinetes y demás VMP no certificados, que podrán seguir circulando hasta enero de 2027.
Si van dos personas en un patinete eléctrico, la sanción será de 100 euros
Es decir, un patinete no puede transportar a dos personas a la vez porque está prohibido.
Los patinetes eléctricos no pueden circular por la aceras: la multa por hacerlo es de 200 euros
También tienen prohibida la circulación por vías interurbanas, travesías, autopistas, autovías o túneles urbanos. En este tipo de infracciones puede haber variaciones por parte de las Ordenanzas Municipales de cada localidad.
Hasta 1.000 euros de multa si el conductor de un patinete eléctrico da positivo en alcohol o drogas
Los conductores de los patinetes eléctricos están sometidos a las mismas tasas máximas de alcohol permitidas por la Ley de Seguridad Vial, así como a la prohibición de conducir con presencia de drogas en el organismo.
Los límites de alcoholemia para patinetes eléctricos son:
Tipo de conductor | Límite permitido en aire espirado (lo que mide el alcoholímetro) | Límite permitido en sangre |
General | 0,25 mg por litro | 0,5 gramos por litro |
Menor de edad | 0,0 mg por litro | 0,0 gramos por litro |
Y las sanciones si los sobrepasas:
Infracción | Sanción/ Retirada de puntos |
Conducir ebrio (superar la tasa de alcoholemia permitida) | 500 euros si circulas con una tasa de alcoholemia de entre 0,25 y 0,50 mg/L de alcohol en aire espirado (0,5 y 1,0 g por litro de sangre). 1.000 euros si superas los 0,50 mg/L de alcohol en aire espirado (1,0 g por litro de sangre) |
Negarse a someterse a un control de alcoholemia o drogas | 500 euros |
Conducir con presencia de drogas en el test salivar | 1.000 euros |
Ir sin casco en patinete eléctrico
No llevar casco si conduces un patinete eléctrico supone 200 euros de sanción. Además, se inmovilizará el vehículo.
Multa por utilizar auriculares
Ir con los auriculares puestos conectados a un reproductor de sonido mientras circulas en un patinete eléctrico: 200 euros de multa.
Conducir con el móvil
Usar el móvil mientras conduces el patinete eléctrico: 200 euros de sanción. Tampoco se puede utilizar cualquier otro dispositivo.
No llevar ropa reflectante
Si circulas de noche en patinete eléctrico y no llevas prendas reflectantes o alumbrado, la multa asciende a 200 euros. Se considera conducción negligente.
Dos personas de mi entorno han tenido sendos accidentes en patinete eléctrico: una sufrió una rotura de la apófisis del radio del brazo izquierdo y otra, heridas y magulladuras en el costado y una fuerte contusión en la rodilla que, de milagro, no acabó en rotura.
Ninguna ciudad española está adaptada ni educada para esto y los políticos tienen que arremangarse y coger el toro por los cuernos, porque hay demasiada dejadez y laxitud en todo lo relacionado con estos peligrosos vehículos. Si no, ¿cómo se explica que haya tantos usuarios de VMP que no cumplan la normativa? Queda muy bien la etiqueta sostenible, pero no pueden ser sostenibles unos patinetes que provocan 385 accidentes desde enero de 2021 hasta septiembre de 2022, 13 de ellos mortales. Mientras tanto, mi familia y yo seguiremos caminando con miedo por las aceras, sobre todo por las que están compartidas con el carril bici, porque sabemos que, en cualquier momento, podría llevarnos por delante un patinete eléctrico.
COMO DESARROLLAR CONCIENCIA ESPIRITUAL
Con el patinete eléctrico
1- velocidad aconsejable 20 kms
2- aceleraciones suaves y progresivas, igual máxima comodidad y seguridad
3- ceder el paso a todos los peatones posibles en tú trayecto, igual a máximos actos de conciencia
4- agradece a los conductores que te ceden el paso, igual a educación espiritual
5- tu relajación y evolución será progresiva a más tiempo más actos de conciencia, igual a pura inteligencia.
Estimado Paco Núñez, ha hecho vd. en este artículo una radiografía que no puede ser más demostrativa de la realidad que estamos viviendo. Desde que vd. publicó, cada día va empeorando lo explicado y cada día hay más peatones que se sienten en peligro de muerte por salir de sus hogares. Multitud de personas de avanzada edad no quieren salir a pasear por temor a sufrir un atropello en las aceras, por la que circulan patinetes, bicicletas, motocicletas y un sinfín de otros artilugios con ruedas, en un alarde de egoísmo absoluto que en forma alguna se apiada de los demás, mostrando la indiferencia más arrogante hacia las personas de edad, a pesar de saber el sufrimiento y miedo que les provoca. No quiero ya ni mencionar el terror que esta situación produce en las personas invidentes, en personas discapacitadas, en niños, en madres y padres, en abuelos, etc., etc. y un largo etcétera. Pero vaya, también tengo que decir que lo que yo escriba aquí y todo lo que vd. se ha molestado en publicar es una pérdida de tiempo, pues quienes tienen la obligación inexcusable de dar solución a este grave problema, ni lo han hecho desde el principio ni lo están haciendo ni lo van a hacer. Concejales de seguridad ciudadana, alcaldes, gobierno autonómico y gobierno central no muestran intención alguna de abordar el asunto, y ya la guinda sobre el pastel la pone la DGT, enviando a los patineteros a circular por la calzada sin tan siquiera aconsejarles que se estudien las señales de tráfico. Nadie puede exigirle al conductor de un patinete que respete aquello que la autoridad competente no le obliga de antemano a conocer. Esta es, para no extenderme, mi pequeña respuesta a lo que vd. magníficamente ha desarrollado en su artículo; mientras que la Asociación de Peatones Atemorizados seguiremos así, aterrorizados, mientras contemplamos como podemos perder la vida en unos segundos por salir a pasear o a comprar a la tienda de la esquina, atemorizados por no saber si nuestros familiares volverán con vida tras ir a comprar el pan; seguiremos viendo cómo niños inimputables reparten droga a domicilio en patinete circulando a toda velocidad por las aceras, etc., etc., etc. Y muchos más etcéteras. Todos los etcéteras que quienes tienen la obligación de solucionarlos, podemos tener por absoluta seguridad que no lo van a hacer. Así que, que Dios reparta suerte y sálvese el que pueda.