Vecinos de la localidad granadina de Iznalloz se han concentrado este miércoles ante la sede de Endesa en protesta por los cortes de luz en sus hogares en «plena ola de frío» recalcando que, «con temperaturas de hasta menos cinco grados vivir sin luz», vulnera sus derechos, mientras que la compañía eléctrica ha vinculado esta situación con los enganches ilegales y con un fraude eléctrico que alcanza «el 70 por ciento en algunas zonas del municipio»
Los vecinos de Iznalloz afirman que, desde hace varios años, familias que pagan habitualmente sus recibos sufren interrupciones del suministro eléctrico «al igual que ocurre en el distrito Norte de Granada, en Pulianas o en barrios de Sevilla y Almería». Una protestante se quejaba de «que hay niños chicos y no se pueden calentar los biberones» y otra ciudadana clamaba por no poder ver la televisión por las noches ni ducharse con agua caliente. Por no mencionar las personas mayores, dependientes o con movilidad reducida que, a oscuras, corren el riesgo de caídas graves. Los cortes de electricidad llegan a durar 10 horas.
Se trata de la salud, de servicios básicos para el bienestar de las personas que son cercenados por la inacción de Endesa (actualmente, la empresa energética es propiedad en un 70% de la eléctrica italiana Enel –cuyo principal accionista es a su vez el Estado italiano–, estando el resto en manos de inversores y accionistas privados).
Algunos de los afectados han acudido a la sede de Endesa, situada en la plaza del Carmen de la capital, para «exponer su situación y visibilizar lo que esta interrupción del suministro eléctrico supone», un escenario en el que «las personas enfermas y electrodependientes sufren más que nadie» junto a los niños «que no pueden estudiar», y los mayores, que «no distinguen su medicación», según denuncian. El alcalde de Iznalloz (Granada), Mariano José Lorente, también ha expuesto la situación a la compañía en el transcurso de la reunión que han mantenido las partes este miércoles.
Fuentes de Endesa relatan a Europa Press que en Iznalloz, de los 4.000 suministros existente, 1.600 no tienen contrato y están enganchados de forma ilegal. Esta situación de fraude llega a ser del 70 por ciento en algunas zonas del municipio. «Si lo analizamos en términos de potencia, el municipio cuenta con 3.000 KVA de potencia instalada y solo 1.200 KVA de potencia contratada, menos de la mitad», precisan desde la compañía.
Endesa informa de que, en 2022, invirtió 300.000 euros en refuerzo de infraestructuras, principalmente en la reforma de tres centros de transformación, los principales que sufren la sobrecarga de la red por el fraude masivo, principalmente destinado a plantaciones de marihuana. Esas mejoras también contemplaron la reconfiguración de la red de baja tensión con la instalación de 4,5 kilómetros de nuevo cableado y destinaron 200.000 euros en la digitalización de las redes para poder actuar más rápidamente en caso de incidencias, a través de telemandos. A ello suman las actuaciones con Guardia Civil para detectar e incautar plantaciones de marihuana y actuaciones de fraude masivo para eliminar enganches ilegales.
Responsables de la compañía se han reunido con el alcalde de Iznalloz para abordar este asunto en el transcurso de un encuentro en el que se ha acordado hacer un seguimiento de cerca de la situación y continuar con las actuaciones que desde la compañía se están realizando para paliar esta situación.
Esta concentración se enmarca en unas jornadas de reivindicaciones por parte de la Plataforma contra los Cortes de Luz que incluirán una manifestación el sábado 28 que comenzará a las 12:00 horas en los Jardines del Triunfo y concluirá una hora más tarde en la Plaza del Carmen.
Más protestas en Sevilla
La plataforma Barrios Hartos celebró el pasado martes una concentración ante la sede central del grupo Endesa, en la avenida de la Borbolla de la capital hispalense, con posterior marcha al palacio de San Telmo, sede del Gobierno de la Junta de Andalucía, de nuevo en demanda de «medidas excepcionales y urgentes» ante los fallos en el suministro eléctrico que padecen zonas de la ciudad, situación que la empresa conecta con las acometidas ilegales para cultivos interiores de marihuana.
Estas interrupciones en el suministro eléctrico en barrios desfavorecidos como Su Eminencia, Torreblanca o el Polígono Sur, zonas marcadas por el paro y la carestía donde diversas voces avisan de falta de mantenimiento en las redes de energía y otras señalan las acometidas ilegales a la red; tocaron techo el pasado verano, en un contexto de temperaturas extremas y, por ende, altas cotas de demanda de energía; pesando también la incidencia de los cultivos interiores de marihuana y las acometidas ilegales para alimentar los mismos, que saturan las infraestructuras energéticas.
En ese marco, la Junta de Andalucía aseguraba que, según la información proporcionada por Endesa, «al menos el 85 por ciento de los cortes tiene que ver con enganches«, es decir con acometidas ilegales a la red eléctrica, mientras los colectivos vecinales esgrimían la tesis de la Subdelegación del Gobierno central en Sevilla, según la cual «no hay ninguna evidencia en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que respalden la afirmación» de Endesa.
«Los centros de transformación que están fallando tienen décadas de antigüedad«, aseveraban los colectivos vecinales, emprendiendo entonces Endesa la instalación de 12 nuevos centros de transformación en las zonas afectadas por esta situación para solucionar estos fallos en el abastecimiento energético, señalando además la escasez de contratos de abastecimiento energético en vigor en las zonas afectadas por esta problemática.
Frente a ello, los colectivos vecinales llamaban a diferenciar entre «los sinvergüenzas» que instalan las acometidas ilegales para alimentar plantaciones interiores de marihuana y quienes sí abonan sus correspondientes facturas de electricidad o sufren una situación de agudizada falta de recursos como para pagarlas.
Comentarios recientes