Los medios deben comunicarnos la verdad

Hace un par de días hablando con un amigo periodista por teléfono, expusimos la situación que estamos sufriendo, de igual forma que la inmensa mayoría de los españoles

Comentábamos cómo miles de profesionales de la sanidad en sus puestos de trabajo con gran responsabilidad, porque tienen en sus manos la vida de las personas, se ven impotentes ante tanta falta de responsabilidad y sobre todo de unidad de criterios.

Miles de españoles  se están exponiendo a diario, no solamente los sanitarios, sino en infinidad de profesiones, que hasta ahora no apreciábamos el valor que tienen en la  sociedad. No olvidemos jamás que nos servimos unos a otros y todos somos fundamentales… de distingos y  diferencias, nada de nada.

Los mejores, los más sabios, los más honestos son los que siempre deben guiarnos… Todos los españoles están a diario y en cada rincón de nuestra geografía dando muestras de fuerza, solidaridad, ejemplo y sobre todo unión para salir delante de esta pandemia tan terrible que nos asola. Debemos seguir uniendo esfuerzos, pues ayudándonos unos a otros la economía y todo lo que se nos viene encima, se irá solucionando.  La hipocresía, deslealtad, doblez, traición y abandono… no se puede consentir de ninguna de las maneras. Los medios deben comunicarnos la verdad y no tapar lo que acontece en cualquier rincón de nuestro territorio.

La preservación de la verdad

Más adelante, comentábamos en la conversación cómo nos enseñaron nuestros abuelos, y padres a luchar y esto, lo sacaremos adelante nosotros, no los que nos representan. Por lo que vemos y oímos en sus intervenciones, están más pendientes de la imagen y de sus ideologías, que de lo que nos devasta en estos momentos, de desorientación, angustia e  impotencia.

En este periodo de vacilación política y social, es mi deber expresar mis opiniones sin el propósito de persuadir, solo estimular y contribuir para abrir accesos hacia el coloquio y entendimiento entre todas las doctrinas que representan el marco parlamentario. Debemos ir contra la manipulación de la verdad, conferida y conducida por los medios, a la ciudadanía. Hay  que apuntalarla y resguardarla, pues es el gran tesoro de la democracia, junto con la libertad.