No tengo ganas de verano. El panorama que me espera es desolador. Para los que no tenemos la suerte de tener casita en la playa, o piscina al aire libre, los días son una condena peor que la de Sísifo. Si a esto se añade tener niños en edad escolar y sin escuela, hace falta mucha imaginación para pintar lo negro de rosa
Antiguamente, una familia de clase media tenía para pagarse un coche, quitarse poco a poco la hipoteca y unos diítas en la playa. Ahora, gracias a nuestros sucesivos gobiernos que nos traen por la calle de la amargura y de una crisis económica a otra (y tiro porque me toca), cada vez está mas complicado acceder al mercado laboral. Y cuando por fin tienes ya algo medio estable, pintas canas.
Y eso significa cero ahorros y muchos gastos en una época que nos ha tocado vivir en la que la fruta (de frutería, no de plástico) se ha convertido en una delicatessen, sólo al alcance de ricos.
Y ya puestos, y enlazando con el tema del verano, invito a la OCU a que denuncie los precios completamente abusivos de los hoteles y apartamentos durante estos meses, que hacen el agosto a nuestra costa (y coste). Hay hostales sin piscina en los que te cobran como si fueran un hotel de cuatro estrellas. Y encima ni están cerca de la playa.
Como siempre, aquí en España se mima a los alemanes y a los ingleses, se les sacan los cuartos que, para ellos, son calderilla mientras a los propios españoles se nos hace cada vez más difícil disfrutar de nuestra tierra, ya que muchos tenemos que optar por quedarnos sin unos merecidos días de descanso o gastarnos el sueldo de un mes en una semana.
Para colmo, se ha invertido menos este año en las Residencias de Tiempo libre, a algunas de ellas (con magníficas instalaciones) se las deja morir sin remedio, porque no interesa, no sale rentable tener contento al ciudadano y el dinero de nuestros impuestos se gasta (o se lo gastan) en cosas inútiles o absurdas. O, directamente, nos roban.
Tampoco ayuda el saber que cada vez que se pone el aire acondicionado tenemos que pagar nuestro tributo a ese gran señor feudal que son las empresas eléctricas, a las que nadie osa tocar.
Qué hacemos con los niños
Aquí en Sevilla hay muchos conciertos, pero oferta cultural para el público infantil, poca y cutre. Ya que muchas criaturas tienen que quedarse en la ciudad, qué menos que organizaran algunas actividades en los barrios, como más cines de verano, teatros infantiles, cuentacuentos, mercadillos de juguetes… En los Veranillos del Alamillo, la programación es siempre la misma todos los veranos, los talleres de manualidades son repetitivos, las películas antiguas, de las que ponen mil veces en Clan…
Toca gastarse los cuartos en Agua Mágica, o en algunas otras piscinas masificadas, o refrescarse bajo la ducha, mientras se devana una los sesos pensando en cómo entretener (sin tanta consola) a los dichosos niños hasta mediados de septiembre…
Lamento la situación.
Los que tenemos una edad nos tocó vivir y padecer una situación a principios de los 70 del siglo pasado muy lamentables, nada que ver con hoy día, ya no le hablo la de nuestros padres. Unas condiciones de vida que por ponerle ejemplos en el ámbito rural por no haber, no había ni médicos, el más cercano a unas decenas de kilómetros.
Mala suerte era enfermar gravemente . Un autobús me dejaba a seis kilómetros de una aldea y con ocho o nueve años y andando solo conmigo mismo porque nadie venía conmigo llegaba por caminos rurales a la aldea,de noche o de día, lloviera o hiciera calor, etcétera… ,lo que hoy llaman senderismo los ociosos.
Los Santos Inocentes llamarían después a una película, que muchos ya vivimos.
Después del 78 empezó el régimen político actual, la continuación del anterior, pero más modernos. Llegó el bienestar social, la presunta libertad que tanto machaca, el terrorismo, etcétera. A mí entender la libertad es lo que los demás te dejan hacer y hoy día viendo el panorama general actual hasta miedo da salir de noche por alguna calle.
Las condiciones económicas han cambiado, un país sin industria,sin moneda propia y que confía en lo de fuera, es imposible que se mantenga dignamente en el tiempo porque siempre le roban,se marchita como las flores de un jardín que no se cuida. Pues eso es lo que pasa y créame, todavía aún, mantenemos unas condiciones de vida que ya muchos les hubiera gustado conocer, muchos , por ponerle otro ejemplo que fueron llevados a lomos de burros cuando fallecieron dentro de un ataúd al cementerio, otros ocho kilómetros….,
Frío,calor, lluvia, juventud, ilusión y después….
Bienaventurados los desengañados , le deseo mucha suerte e intente siempre ser feliz porque es lo que tenemos.
La salud es la mayor riqueza que tenemos , teniéndola, lo tenemos todo. A luchar que son dos días…
Un saludo.