Los paros y protestas que están ocurriendo en Bolivia, máxime en la zona de Santa Cruz de la Sierra, el oriente boliviano más rico y petrolero, así como la violencia desatada, son síntomas de un sistema agotado y que ya no tiene nada que ofrecer
Por todas partes de este desgraciado planeta se observa la misma sintomatología de raíz. Lo que ocurre es que en unos lugares se manifiesta de una forma y en otros de otra. ¿Que le pide el gobierno a la gente que pare las protestas y que sean pacíficos? Si ya no tienen qué comer…
Una parte del poder ha paralizado los camiones con alimentos, así como el gasóleo, que ya no hay. Un problema en el establecimiento del censo del país es lo que aparentemente ha generado el problema, pero realmente son las luchas por quién acapara más poder en sus manos.
Manipulaciones del censo
Manipulaciones del censo, ciudadanos que llevan nueve años muertos y siguen votando en elecciones, gente que vota de fuera del país cuatro veces porque tiene cuatro carnets de identidad… ¿Cómo le puede pedir un gobernante a su gente que pare la violencia si él es el principal artífice de la violencia? Claro, sí, una violencia ejercida de forma sutil, manipuladora durante varios años y que ya no es violencia callejera. Es más escénica, pero violencia psicológica al fin y al cabo… y económica.
Si no dejan circular ni a las ambulancias, entonces la cosa ya es muy grave. Estos gobernantes de hoy no gobiernan sino que manipulan y manipulan hasta que su acción les explota en la cara. ¿Quiénes son estos vivos sin cerebro, sin empatía para con los que dicen gobernar? Si la tensión se recrudece, puede llegar al borde de una guerra civil en el país, ya que ni la policía está con la gente, sino que actúa de guardián del MAS, un movimiento que forma parte del brazo del poder. En algunos casos, ya esta situación está generando hambruna, así como conflictos de todo tipo.
Comentarios recientes